La plaza de Santa Croce toma su forma a finales del siglo XIII, cuando la iglesia franciscana fue completamente reconstruida (1295) según el proyecto de Arnolfo di Cambio e incluida en las nuevas murallas de la ciudad. Las imponentes dimensiones de la iglesia, debido al fuerte poder de los Frailes Menores, hacen necesaria la ampliación de la plaza, hecho que favorece la predicación y, desde el siglo XV, la organización de fiestas, juegos y torneos. Entre los siglos XVI y XVII se perfilan los palacios que se asoman a la plaza donandole su aspecto actual. En 1863 se realizó la fachada de la iglesia en estilo neogótico, que inspiró la pintura metafísica y fue apreciada por artistas como Giorgio De Chirico.
Durante el mes de junio la plaza cambia completamente su aspecto, transformándose en un verdadero terreno de juego cubierto de arena y rodeado de gradas que anualmente acoge los tradicionales partidos del Calcio Storico Fiorentino: con el resultado de las dos semifinales, el 24 de junio, en ocasiones de la fiesta de San Giovanni Battista, patrono de la ciudad, se juega la final que siempre atrae a un gran número de espectadores, ciudadanos y turistas, curiosos por conocer este ‘deporte’ tradicional.
Piazza di Santa Croce
Piazza di Santa Croce, Firenze