La comida y el vino son un conjunto de relaciones que se establecen entre la comunidad local y los productos gastronómicos y enológicos típicos de un territorio. Conocer la tradición culinaria de una región no sólo significa conocer lo que identifica a las personas que allí viven, representa también una forma nueva de viajar y descubrir lugares desconocidos.
Los platos típicos de la cocina florentina son sencillos y al mismo tiempo sabrosos, el primer plato, famoso en todo el mundo es el bistec a la florentina, que toma su nombre por la ciudad que la hizo famosa, Florencia; pero también famosos son otros platos de la tradición como: la pappa al pomodoro (hecho con pan frío y tomate), la ribollita (una sopa de verduras y pan) y los callos o el lampredotto. Este es un plato típico hecho con el abomaso, uno de los cuatro estómagos vacunos, y su máxima expresión es comer estos platos por las calles en uno de los quioscos llamados “lampredottai”, acompañándolos con una copa de vino Chianti.
Hablando de comida, no olvidemos que Florencia es la ciudad donde fue inventado el helado gracias al ingenio de Bernardo Buontalenti: las heladerías artesanales de calidad son un orgullo para la ciudad, y disfrutar de un cucurucho de helado es una experiencia que no puedes perderte. Además del helado hay muchos postres típicos florentinos, como la schiacciata alla fiorentina (un postre de Carnaval con aroma de naranja), la schiacciata con uvas (un bollo con azúcar y uvas hecha en septiembre y octubre), el pan di ramerino (pan bendito de la época de Pascua) y los buñuelos de arroz.
Una larga tradición culinaria caracteriza también los pueblos que están alrededor de Florencia, recordamos, por ejemplo, platos como: el peposo dell'Impruneta (un guiso cocinado al horno con mucha pimienta, un poco de tomate y vino tinto), los tortelli mugellani (ravioles con relleno de patatas cocidas, queso, ajo y perejil). Son también famosos los productos locales, como la cebolla de Certaldo, el melocotón de Londa y el azafrán... Para conocer las recetas típicas, descarga nuestro recetario.
En Florencia no faltan lugares donde comer, que pueden de satisfacer todo tipo de exigencia; en el barrio de San Lorenzo, por ejemplo, se encuentra el histórico Mercado Central, construido entre 1870 y 1874 por el arquitecto Giuseppe Mengoni, y hoy en día es símbolo de calidad para la comida y el vino. El Mercado de Sant'Ambrogio fue diseñado por el mismo arquitecto que hizo el mercado central y se remonta a la misma época, como el primero hay productos locales de calidad.
Paseando por las calles del centro es fácil toparse con las numerosas tiendas históricas, tabernas y bodegas que tienen su punto fuerte en los platos típicos, los embutidos y los quesos toscanos. En la ciudad también se pueden encontrar varios restaurantes étnicos que van desde Asia hasta África, pasando por América Latina y Oriente Medio.
En Florencia se pueden vivir todo tipo de experiencias gastronómicas y para todos los bolsillos, desde trattorias típicas hasta restaurantes con estrellas Michelin, con amplias listas de vinos toscanos e italianos y una cocina fina y refinada.